Luego de conocer nuestro aparato fonador, debemos considerar ciertas pautas que ayudarán a mantener nuestra voz sana y apta para el desarrollo de nuestra profesión.
Para introducir el concepto, pautas generales de higiene vocal, les ofrecemos una breve definición.
Higiene vocal: Conjunto de pautas que tienen como finalidad colaborar en la preservación de la salud vocal. No se limita al cuidado del sistema fonatorio sino también al de otros órganos, funciones y hábitos de vida.
Pauta de higiene vocal general:
- No fumar. El humo contiene productos tóxicos, su inhalación produce irritación y modificación de la mucosa del aparato respiratorio; las secreciones se tornan más espesas y no cumplen de manera eficaz las funciones de lubricación. Puede producir lesiones de roce en las cuerdas vocales. El excesivo consumo de nicotina genera un aumento de las secreciones gástricas que inflaman la región faringolaríngea.
- No abusar de las bebidas alcohólicas. Debido a su acción vasodilatadora, congestionan la mucosa del sistema fonador, lo que conduce a una disminución del rendimiento vocal.
- Moderar el consumo de café, té: producen ansiedad, temblor, irritabilidad, insomnio, sequedad de las mucosas, trastornos gastrointestinales, hipertensión y alteraciones de los ritmos respiratorios y cardíaco.
- Consumir alimentos con condimentos delicados como orégano, tomillo, azafrán, albahaca, laurel, romero, nuez moscada y canela y evitar los picantes que irritan la mucosa digestiva: vinagre, pimienta, ají molido y mostaza. Se debe recordar la proximidad anatómica de los sistemas respiratorio y digestivo. Además, no ingerir alimentos (sólidos-líquidos) a temperaturas extremas. Incluir proteínas en la dieta que favorece la tonicidad muscular.
- Sueño: dormir en ambiente ventilado y la cantidad de horas necesarias (8 horas).
- No abusar de la calefacción o del aire acondicionado: resecan las mucosas, así como los ambientes contaminados de humo y ruido.
- Evitar la ropa muy apretada al cuerpo, que no permite un correcto desplazamiento costodiafragmático.
- No hablar durante situaciones de esfuerzo físico (bailando, haciendo gimnasia, corriendo, levantando elementos pesados, etc.)
- No utilizar intensidades vocales excesivas, ni gritar, sobre todo en situaciones de enfado o estrés ya que las cuerdas vocales adquieren cierta rigidez y pueden lesionarse.
- No hablar con otra persona a gran distancia, esta situación aumenta notablemente la tensión glótica.
- No competir con el ruido externo, por ejemplo en una calle muy transitada y ruidosa, en un vehículo en movimiento o en una discoteca.
- No hablar con el aire residual de los pulmones, esto exige un gran esfuerzo a nivel de la glotis.
- Evitar las bocanadas de aire cuando se habla o se canta, ello constituye una agresión para la delicada mucosa que recubre las cuerdas vocales.
- No efectuar el carraspeo brusco y sonoro, irrita los pliegues vocales, es probable que se produzcan microlesiones.
- Evitar exponerse al sol antes de una tarea profesional, ya que produce una intensa relajación muscular, incluyendo al sistema fonatorio.
- Recordar que algunos medicamentos producen algunos trastornos en el funcionamiento general del organismo, tales como: sequedad de mucosas, estreñimiento, etc.
- Ingiera diariamente 3 litros de líquido y 6 vasos de agua dos horas antes de un esfuerzo vocal prolongado o intenso, evitando las bebidas gaseosas. Este hábito colabora en la lubricación del aparato vocal.
- Evite el uso frecuente de auriculares a altas intensidades, produce un daño auditivo progresivo alterando el “autocontrol fonatorio”.
- Realice un calentamiento vocal antes de realizar un uso sostenido de la voz.
- Cuidar la postura, procurando estar erguido pero sin extender el cuello.
Las malas posturas de la cabeza y cuello tensan las cuerdas vocales